[NdP] Los Ingenieros Agrónomos y de Montes expresan su preocupación por el riesgo de dispersión de las competencias del medio rural
Apuestan por mantener y reforzar la integración en el Ministerio de Agricultura
de las principales políticas que inciden en el desarrollo rural y la biodiversidad.
Ambos colegios crean una comisión conjunta de trabajo para el Desarrollo
Rural y su reto demográfico interior ante la situación de “emergencia social y
ambiental”.
Madrid, 20/01/2020 El Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros
Agrónomos (CGCOIA) y el Colegio Oficial de Ingenieros de Montes (COIM) han
creado una comisión conjunta de trabajo para el Desarrollo Rural y su reto
demográfico interior ante la situación de “emergencia social y ambiental”.
La comisión, encabezada por Baldomero Segura, presidente del CGCOIA, y Eduardo Rojas, decano del COIM, tendrá como objetivo el seguimiento de las decisiones administrativas, legislativas o de planificación que afecten al desarrollo rural y el reto demográfico y trasladar a la sociedad y los responsables políticos las propuestas deambos Colegios.
Para ambas ingenierías el reto es importante, ya que consideran que mejorar los
recursos forestales y las producciones agrarias es fundamental para mejorar el medio
ambiente global (lucha contra el cambio climático) y local (reducción de la
contaminación y mejora del paisaje), la biodiversidad, la soberanía alimentaria y la
calidad de los alimentos que consumimos.
Para lograrlo estos sectores deberían ser el motor del desarrollo económico y social
del medio rural en el que se implantan. Con ello se garantizaría además la viabilidad
demográfica de estas zonas.
Desarrollo Rural debe seguir en Agricultura
Desde ambas instituciones valoran positivamente la continuidad de Luis Planas al
frente del Ministerio de Agricultura, y han defendido que se prosiga coordinando desde este departamento las políticas de Desarrollo Rural ante la incertidumbre generada en el reciente Real Decreto de estructura del Gobierno en el que no se mencionan éstas de forma agrupada.
El fraccionamiento en diferentes departamentos, advierten, comportaría conflictos y
disfunciones que afectaría severamente a la eficiencia de las políticas para el sostén
demográfico de la España interior.
Esto se produciría además justo en el momento de la negociación de la PAC 2021-27
y consideran que sería “tremendamente contraproducente” debilitar o dispersar lainterlocución española en la UE en vez de alinearse con los diferentes países que
proponen reforzar y priorizar las políticas de desarrollo rural.
Todo ello en un momento en el que hay un intenso debate en el seno de la Comisión
Europea sobre la posible integración del primer y segundo pilar de la PAC y, en todo
caso, del refuerzo de las actividades incluidas en el desarrollo rural.
La apuesta clave por la Bioeconomía
En una situación que insisten en calificar de “emergencia social y ambiental” ante el
abandono de las zonas rurales, ambos Colegios coinciden en recordar la apuesta
“decidida y clara” de Europa por frenar esta situación. “Los pilares de la política que podrán mitigar y revertir el problema descansan sobre la gestión agraria, la ganadera y la forestal y las correspondientes actividades que rentabilizan sus externalidades”, aseguran.
Así, ponen como ejemplo las bioenergías, biomateriales para la construcción, industria textil o para la sustitución de plásticos; toda una batería de oportunidades para proyectar la bioeconomía de nuestro país.
Seguir las líneas de trabajo ya iniciadas
Es por ello que han invocado a seguir las líneas de trabajo ya iniciadas en el ámbito
del Desarrollo Rural sacando conclusiones de las experiencias pasadas y primando
que los fondos europeos se empleen para modernizar los sectores primarios a la vez
que se priorizan las inversiones tractoras que tengan capacidad multiplicadora.
“Consideramos una oportunidad los constantes cambios, evoluciones y exigencias a laproducción de alimentos y bioproductos, cuestión que se debe traducir en la
implantación de nuevas empresas”, explican.
“Es vital para la supervivencia de nuestro medio rural el creciente interés de los
habitantes de medios urbanos; este interés se debe transformar en alcanzar mejores
rentas en las producciones y generar nuevos ingresos por las externalidades de éstas
mediante su reconocimiento legal y compensación económica: dos oportunidades de
generar riqueza económica, social y ambiental al gestionar de forma sostenible los
espacios y recursos agrarios y forestales”, añaden.
Requiere de una acción conjunta
Por ello abogan también por que las políticas públicas contribuyan a preservar el
contexto social y cultural de las zonas rurales, ya que es parte indisociable de este
espacio.
De ahí que recalquen que mantener la esencia rural y su paisaje pasa por mantener a
su vez su actividad agraria, ganadera y forestal. Es decir, la producción primaria y su
gestión, la biodiversidad y el desarrollo rural constituyen un conjunto indisociable que requiere de una acción conjunta, coordinada y suficientemente dotada.
NdP CGCOIA COIM 20 01 2020 – 2