Partners09/06/2023

Ingeniería agronómica para la rehabilitación energética de los edificios mediante cubiertas vegetales

La Comunitat Valenciana, a través de empresas que trabajan con biosistemas y que tienen un ADN innovador, lidera, a nivel nacional, el cambio necesario para activar una transición ecológica que no tenga vuelta atrás. Sin duda, nuestro partner Projar, que acumula una gran experiencia en desarrollar soluciones para paisajismo y bioingeniería, se encuentra en este un grupo de empresas que focaliza sus inquietudes medioambientales y su conocimiento en proyectos de carácter disruptivo. Por ello, una de sus líneas de trabajo son las cubiertas ajardinadas, sobre las cuales vamos a hablar en este artículo.

Edificación sostenible
La edificación, como parte integrante de las ciudades, ha evolucionado en los últimos años hacia una arquitectura sostenible, que se sustancia a través de ciertas técnicas y sistemas Cuyo objetivo es construir de forma integrada en la naturaleza, apostando por la confortabilidad y calidad de vida de los ocupantes de las viviendas, optimizando recursos y disminuyendo el consumo energético.

Uno de los sectores que más emisiones genera en Europa es el de la edificación, responsable de una tercera parte de las emisiones de GEI y del 40% del consumo energético. Asimismo, más de la mitad de los edificios residenciales de las ciudades del territorio nacional se construyeron hace más de 40 años sin ninguna normativa energética. Por ello, precisan ser intervenidos para mejorar su respuesta energética, su accesibilidad o la calidad de su espacio, tanto desde el punto de vista de las personas que residen en ellos como de su aportación al espacio urbano.

Aislamiento térmico
Las cubiertas ajardinadas son, por excelencia, uno de los elementos integrantes en la arquitectura bioclimática. Sus beneficiosos efectos en el aislamiento térmico y la mejora en la inercia térmica que proporcionan a los edificios las convierten en soluciones para un consumo energético responsable. Además, las cubiertas ajardinadas ofrecen numerosas ventajas, como la reducción de aguas de escorrentía, la mitigación del efecto isla de calor, la reutilización de espacios en desuso o la revalorización económica de los edificios, entre otras.

La total implantación de estas envolventes arquitectónicas pasa por una buena legislación y una correcta definición en la arquitectura sostenible, que hoy en día, y sobre todo en España, parece que empieza a hacerse notar. Ante la clara emergencia climática y energética, ciudades como Madrid, Barcelona o varias de la Comunitat Valenciana empiezan a dar los primeros pasos para ser referentes activadores en la transición ecológica.