Los ingenieros agrónomos encabezan la estrategia investigadora en el campo de los bioestimulantes
La innovación en el campo de los agronutrientes y los bioestimulantes avanza a pasos agigantados. La demanda de ingenieros agrónomos para los departamentos de I+D+i y para cubrir los perfiles de prescripción y venta consultiva siguen encabezando las ofertas del COIAL en cuanto a número y en cuanto a remuneración potencial.
La formación especializada es importante, y por eso la gran apuesta del COIAL en su “Programa Experto Profesional en Agronutrientes y Bioestimulantes: Gestión de la Innovación y Transferencia Tecnológica”, que está punto de finalizar su exitosa segunda edición.
Nuestro partner PLYMAG, como empresa en agronutrientes es un claro ejemplo de buscar la diferenciación a través de su equipo altamente cualificado, ya que se centran en conseguir perfeccionar sus procesos y productos, con el objeto de conseguir los mejores rendimientos de los cultivos.
Además Plymag se ha caracterizado por poner al frente de sus equipos de investigación a ingenieros agrónomos que conozcan a la perfección todo el sistema productivo, ya que la capacidad de visualizar la rentabilidad final para el agricultor les da ventaja al emprender y seguir sus proyectos innovadores. De ahí la diferenciación de los ingenieros agrónomos al respecto de otras formaciones: el conocimiento de todo el sistema alimentario es una ventaja.
De entre todos los avances que comparte PLYMAG con nosotros nos quedamos con sus trabajos con algas. Ya lo hemos dicho los ingenieros agrónomos en muchas ocasiones, buena parte de nuestro futuro pasa por el mar. La investigación, en lo referente a la obtención de extractos naturales de las algas Ascophyllum nodosum, Ecklonia maxima y Ortiga Spp y Equisetum arvense les sitúan en la vanguardia en productos ecológicos, bioestimulantes y de alto valor añadido para el agricultor.
Estas investigaciones les ha llevada a conseguir la acción “antienvejecimiento o anti-senescencia” a través de la conservación de los niveles de clorofila, proteínas y ácidos nucleicos, así como la resistencia al estrés hídrico a través de sustancias como el ácido algínico, manitol o las betaínas, a través de formulaciones naturales.
Y la prueba de todo ello es la recién presentación de Bioferro en el Biostimulants World Congress, un bioestimulante a base de algas de extracción propia, ideado para estimular a la planta de forma natural a la vez que previene y combate la clorosis fèrrica.